¿Cómo puede el Movimiento ser autónomo sin quedar marginado?

Fethullah Gülen

El Movimiento ha demostrado que puede mantener una identidad estable y duradera durante muchos años. De hecho, ha mejorado su habilidad para resolver problemas planteados por el entorno, y se está haciendo cada vez más autónomo en su capacidad de acción dentro de la red de relaciones en la que se encuentra.

El Proceso 28 de Febrero demostró asimismo que el Movimiento posee la habilidad de producir definiciones y significados nuevos integrando el pasado con los elementos y resultados emergentes en una situación presente dentro de una identidad estable. Esto a su vez refuerza su cohesión interna y localiza terrenos comunes fuera de sí mismo. Por lo tanto, mientras que los métodos y medios de proveer servicios pueden cambiar o evolucionar con el tiempo, el núcleo de la identidad del Movimiento no cambia con el tiempo y la situación: se mantiene firme.

Además, el fuerte apoyo a Fethullah Gülen y a las actividades del Movimiento —especialmente durante el período de difamación tras el golpe de estado posmoderno— por parte de un amplio espectro de políticos, hombres de estado, organizaciones civiles y periodistas, confirma la idea de que la identidad del Movimiento es integradora y en absoluto excluyente.