¿Cuál fue la respuesta de Gülen a la politización y el caos de finales de los 70 en Turquía?

Fethullah Gülen

En 1976, la Dirección de Asuntos Religiosos destinó a Gülen a Bornova, Izmir. Izmir contaba con una de las principales universidades de Turquía, con la usual presencia masiva de estudiantes y un considerable activismo militante, típico de las universidades en la década de los 70.

Gülen advirtió que los grupos izquierdistas contaban con redes de extorsión que recaudaban dinero de los comerciantes y empresarios de la ciudad y alteraban deliberadamente la vida comercial y social de la comunidad. Estos pandilleros habían asesinado ya a algunas de sus víctimas. Gülen denunció este hecho en sus sermones y animó a los que estaban amenazados por las redes criminales a no ceder a las amenazas y a la violencia, ni tampoco a reaccionar violentamente para no exacerbar la situación. Les llamó a denunciar los hechos a la policía para que los pandilleros fueran llevados ante la justicia por los canales adecuados. Este llamamiento suyo hizo que le amenazaran de muerte.

Al mismo tiempo, retó a los estudiantes de izquierda y de derecha a venir a la mezquita a discutir sus ideas con él. Se brindó a responder a todas las preguntas que quisieran hacerle, tanto sobre temas laicos como religiosos. Muchos estudiantes aceptaron su invitación, y así, además de sus tareas diarias de impartir enseñanza religiosa tradicional y predicar, Gülen dedicaba las tardes de los domingos a estas sesiones de debate.