¿Qué era el « Grupo de Trabajo Occidente», y por qué atacaba a Hizmet?

Fethullah Gülen

El Grupo de Trabajo Occidente fue un grupo creado inicialmente dentro de las Fuerzas Armadas Turcas (TSK); posteriormente fue disuelto o convertido en varias unidades tácticas. El Grupo de Trabajo Occidente interfería en política y en el gobierno y se convirtió en una unidad que planificaba intrigas antidemocráticas y acontecimientos tipo golpe de estado. Desde que el grupo fue disuelto, sus miembros han resurgido en unidades de combate del TSK que han seguido conspirando para preparar golpes de estado. El grupo afirmaba que su nombre reflejaba su adhesión a los valores occidentales porque la occidentalización es uno de los principios fundamentales de la República Turca.

Sin embargo, las acciones de sus miembros desmentían sus declaraciones: la labor de salvaguardar la democracia supone seguir el juego democrático en toda su amplitud; significa exigir que todos los actores políticos expongan a la población las razones de sus posiciones y políticas; significa asegurarse de que «las reglas del juego» sean respetadas; significa luchar contra el monopolio de la información; significa oponerse a las políticas del gobierno de forma constructiva mediante políticas alternativas creíbles. Significa también que la autonomía de los actores de la sociedad civil debe ser respetada. Sus intereses y proyectos no deben ser absorbidos dentro del ámbito político, sino que los actores políticos y la sociedad en general deben reconocer y respetar la distancia que los actores de la sociedad civil mantienen respecto del ámbito político.

Desgraciadamente, la cultura de este grupo de interés especial y de otros similares a él no estaba dispuesta a asumir la tarea de salvaguardar la democracia el 28 Febrero durante el período del golpe de estado posmoderno y la intervención subsiguiente, pues esos grupos han querido siempre reducir todo lo que la sociedad civil produce a luchas políticas internas, amenazas y manipulación. La población turca ve ahora que los grupos de interés representados por unidades tales como el Grupo de Trabajo Occidente no están interesados en absoluto en los valores occidentales. Los miembros del Grupo sueñan con un Occidente carente de democracia, derechos individuales, derechos humanos, libertad de culto e iniciativa civil.