¿Quién creó a Allah?

Algunas personas que no tienen vida espritual a veces preguntan: ¿Si Allah creó todo, quién Lo creó a Él? El Profeta –la paz sea con él– nos previno de que algunas personas preguntarían mucho acerca de esto: "Llegará un día en el que unos se sentarán cruzando las piernas y preguntarán: "Si Allah creó todo, ¿quién Lo creó a Él"[1]?

En el mejor de los casos se puede pensar que el asunto está basado en la relación entre la causa y el efecto. Todo se puede considerar como un efecto atribuido a una causa previa, que a su vez se atribuye a una causa previa y así sucesivamente. No obstante, tenemos que recordar que la causa es sólo una hipótesis que no existe en la realidad. Todo lo que objetivamente existe es una secuencia particular de circunstancias que a menudo -pero no siempre- se repite. Si esta se aplicara a la existencia, no podríamos encontrar al creador de la primera causa, porque cada creador tendría que tener un creador previo. El resultado final sería una cadena interminable de creadores.[2]

El Creador tiene que ser Auto-Subsistente y Uno, sin igual. Si alguna cosa creada "causa" algo es porque esta capacidad ha sido creada por este ser, ya que solamente el Creador es Auto-Existente y Auto-Subsistente. Exclusivamente el Creador crea en realidad y determina algunas causas y efectos posibles por Su creación. Por eso, cuando nos referimos a Allah decimos que es el Sustentador que da la vida a toda Su creación. Todas las causas empiezan en Él y todos los efectos terminan en Él. En verdad las cosas creadas son un "0" a las que nunca se le añade nada, a menos que Allah otorgue el valor o la existencia real colocando un positivo "1" antes del "0".

En la esfera de la existencia lo que nosotros llamamos causas y efectos no tienen una influencia directa ni indepen­diente. Nosotros tenemos que usar estas palabras para enten­der cómo una parte de la creación ha sido hecha comprensible para nosotros y otorgada a nuestro uso. Incluso esto confirma nuestra dependencia de Allah. Allah no necesita las causas ni los efectos sino que somos nosotros quienes necesitamos entender lo que Él ha creado.



[1] Bujari, Itisam, 3.
[2] La noción vana de una cadena interminable de creadores era uno de los argu­men­tos usados por los teólogos musulmanes para explicar la necesidad de creer en Allah.