Gülen: «La Unión Europea es partidaria de los musulmanes turcos»
Por primera vez, la Unión Europea (UE) iniciará unas negociaciones para el ingreso de un país musulmán, ¿qué opina Vd. acerca de ello desde el punto de vista de la identidad y la visión europeas?
En caso de la Unión Europea se ha hablado de los beneficios de Turquía. No sé si los países europeos se dan cuenta pero los beneficios de la Unión Europea con el ingreso de Turquía son aún más grandes. Si los países europeos persisten en su negativa a pesar de darse cuenta de dichos beneficios quiere decir que esta obstinación sobrepasa a la razón lógica. De hecho, en esta relación, Europa posee unos beneficios tan importantes en lo que respecta a su prestigio y futuro como entidad. Desde hace mucho tiempo nuestros intelectuales han estado a favor de la integración con Europa. Nos encontramos en Turquía en un período de europeización que comenzó en Tanzimat (Reforma política del año 1839) y se aceleró con la llegada de la República (1923). Como es sabido el primer acuerdo serio tuvo lugar en 1963. Tras dicho acuerdo se celebraron conferencias a favor y en contra en toda Turquía. En los años 1966-67 algunos personajes de renombre se oponían al acuerdo de 1963. La opinión de estas personas es comparable a la que se hace hoy en día en Turquía, con opiniones como «Son un club cristiano, van a jugar con nosotros, nos quieren cristianizar…»
Hoy algunos musulmanes han escrito libros en los que expresan la misma visión, diciendo que con la integración en Europa, con sus diferentes concepciones acerca de Dios y la religión nos influirán de manera negativa, «robando nuestra juventud». Existía una serie preocupación acerca de nuestra condición como musulmanes y país necesitado. Quizás ellos no han confiado completamente en sus valores religiosos pero no lo expresaban de manera abierta. No sé si hoy continúan desarrollándose las mismas preocupaciones pero hasta el día de hoy era obvio que no tenían intenciones de iniciar las conversaciones de ingreso.
En este último período, ¿existe algún cambio en sus intenciones?
En Alemania, existía una posibilidad de asimilación de la comunidad turca pero dicha comunidad protegió su identidad y después de unas generaciones resurgió. En principio esta comunidad turca recibía influencias pero en estos momentos son ellos los que influyen en el conjunto de la sociedad alemana. En varias ocasiones, vemos y escuchamos que con respecto a las otras comunidades de musulmanes tanto en Europa como en EEUU, a las comunidades turcas las miran con mayor agrado y aceptación. Quizas la democracia, la republica y el laicismo en Turquia desempeñan un papel crucial en su aproximacion amistosa.
Además, el Islam turco tiene una mayor presencia en la agenda de los asuntos a tratar de los EE.UU. y de Europa que en Turquía.
¿Y que opina acerca de la fecha de apertura de las negociaciones que ha sido anunciada?
Incluso sin tener una certeza absoluta en cuanto a si entraremos en la Unión Europea o cuando se dará este paso, el anuncio de dicha fecha ha tenido un efecto significativo en la nación turca. Parece ser un éxito que ha sido logrado por el actual gobierno turco. Hay muchos aspectos que han de ser cuestionados, pero no quiero poner demasiado énfasis en ellos, ya que esto puede ser —injustamente— percibido como ambiciones políticas. Esta fecha para las aspiraciones de nuestra candidatura es una buena noticia más para los europeos que para nosotros, y debería haber sido recibida como tal.
¿Por qué piensa usted que son buenas noticias para Europa?
Porque existen ciertas potencias que aspiran a dominar la región. China ha penetrado ya en ella, por medio de su comercio competitivo y a través de su comportamiento amable. Ni los EE.UU. ni Europa pueden desafiarles. Con total seguridad surgirán revoluciones económicas a tener en cuenta y en relación a esto China está amenazando al mundo.
Con una alianza con Turquía ¿cómo puede Europa plantar cara a la expansión China?
Turquía puede ser un puente entre Oriente Medio y el Extremo Oriente. Europa necesita de la profunda y rica herencia de Turquía en relación al conocimiento y comprensión de Oriente Medio. Han aceptado Chipre, pero Turquía es un país mucho más importante y Europa está en la obligación de realizar una valoración más apropiada acerca de esto. Otra dimensión del asunto es que, aunque los gobiernos europeos actuales no puedan apreciarlo, a nivel de población se percibe unos sentimientos notables de consideración y adhesión al pueblo turco debido a nuestro prestigio histórico así como nuestra influencia psicológica. Ambas por igual, nuestra historia y la actual administración democrática republicana de Turquía desempeñan un papel señalado. Podemos observar esto de manera activa en aquellos países de Europa donde tienen lugar actividades educativas turcas. Por lo tanto, Europa puede convertirse en una potencia en la región sólo si pueden ganarse la simpatía de Turquía. Los EE.UU. quieren mantener su dominio en la región también. La administración estadounidense ha parecido hasta ahora apoyar la candidatura de Turquía en la Unión Europea aunque esto pueda ser. Los EE.UU. no desearían perder a un aliado como Turquía o su coalición y dejarlo en manos de otra potencia, si ellos quieren mantener y preservar dicho poder en la zona.
¿Qué piensa usted de los resultados del gobierno turco durante la cumbre de diciembre en Bruselas, tuvo un papel sumiso o de duro negociador?
Muchos estadistas han aspirado a conseguir este objetivo. Todo este esfuerzo hubiera sido en vano en caso de haber sufrido otro fracaso. El gobierno turco se encontraba bajo la influencia de esta atmósfera psicológica. Tengo en elevada estima acontecimientos que sucedieron en Bruselas durante las negociaciones.
¿Por ejemplo…?
La determinación de dejar la reunión fue acorde a nuestro honor nacional. Esto significó un «no necesitamos esto, déjenles reconocer sus propias necesidades». Esta acción en un momento tan crucial resultó ser favorable a nuestros intereses y se dio un paso atrás. Los momentos cruciales no siempre concluyen favorablemente. Los representantes europeos bien podrían haber dicho que «pueden abandonar la mesa de negociaciones». Nuestro gobierno habló con todos los representantes, uno tras otro y trató cada cuestión separadamente, cosa que aprecié. Este fue un trascendental final a los esfuerzos de muchos estadistas. Y lo que es más importante, se dio a los europeos una lección en ese lugar.
¿Qué tipo de lección?
Las banderas de cada país fueron ubicadas en el mismo lugar en donde los representantes se encontraban de pie. Se me saltaron las lágrimas cuando el Presidente, el Sr. Recep Tayyip Erdogan y el Ministro de Asuntos Exteriores, Abdullah Gül izaron nuestra bandera, nuestra enseña sagrada. Deseé que la besaran y le quitaran el polvo. Abdullah Gül así lo hizo e introdujo la bandera en su bolsillo. Esto fue una lección tan importante como lo fue la cumbre para mostrar la actitud del pueblo turco hacia ciertos valores. A veces tenemos que ver los aspectos brillantes de cosas. Cuando se obtienen resultados desfavorables, es mejor continuar con la crítica con valoraciones sensatas, pero aun hay otras muchas cosas positivas que son dichosas para la reputación de nuestra nación. Pienso que esto fue observado por toda nuestra comunidad intelectual y será tenido en gran estima. La crítica, por otra parte, debería ser realizada sin emociones y no ser utilizada como un instrumento para aspiraciones políticas. Yo agradecería cualquier labor por el bien de nuestro país. El gobierno, de la misma manera, debería ser también apreciado sin queja alguna, por cuanto cualquiera de sus actos son meritorios.
- Creado el